Impulsa tu carrera con competencias

Para desarrollar todo el potencial de su carrera hay que adquirir las competencias adecuadas. Si quiere ascender, cambiar de profesión o simplemente mantenerse a la vanguardia de su sector, adquirir las competencias más demandadas puede darle el impulso que necesita. Descubra las competencias clave que pueden impulsar su carrera hacia nuevas cotas y abrirle las puertas a oportunidades apasionantes.

Impulse su carrera con una evaluación de competencias

No importa en qué punto de su trayectoria profesionalPara seguir siendo competitivo y alcanzar sus objetivos profesionales, es esencial mejorar continuamente su conjunto de competencias. El mercado laboral cambia constantemente y los empresarios buscan candidatos con una amplia gama de competencias que puedan contribuir al éxito de su organización.

Si adquiere unas competencias muy solicitadas, podrá posicionarse como un activo valioso y aumentar sus posibilidades de promoción profesional.

Si no lo hace, puede estar perdiendo excelentes oportunidades de progresar en su carrera y alcanzar sus objetivos. La aceleración de la carrera es interesante cuando sabes qué son las competencias y las capacidades, cómo se relacionan entre sí y por qué deberías centrarte en desarrollar tus competencias más que tus capacidades.

¿Qué son las competencias y las aptitudes?

En un mercado laboral en rápida evolución, es más importante que nunca ir un paso por delante y desarrollar las capacidades que buscan los empresarios.

Tanto si acabas de empezar tu carrera profesional como si quieres pasar al siguiente nivel, la adquisición de competencias puede ayudarte a destacar entre la multitud y a alcance sus objetivos profesionales.

Pero, ¿qué son exactamente las competencias y cómo pueden impulsar tu carrera?

La competencia es la capacidad de aplicar conocimientos, habilidades y actitudes para lograr un resultado deseado en un contexto específico. No se trata sólo de tener habilidades, sino de saber cómo y cuándo utilizarlas eficazmente.

Habilidades y destrezas son dos términos que a menudo se utilizan indistintamente, pero tienen significados e implicaciones diferentes. Las destrezas son las habilidades específicas que se pueden realizar, como escribir a máquina, hablar un idioma o utilizar un programa informático. Suelen ser mensurables y pueden adquirirse mediante la formación o la práctica.

Las aptitudes son importantes porque representan el conocimiento y la comprensión necesarios para llevar a cabo las tareas, pero no bastan para garantizar el éxito en el lugar de trabajo. La competencia, en cambio, no se refiere sólo a las aptitudes, sino también a la mentalidad, la actitud y el comportamiento. La competencia es la capacidad de adaptar las aptitudes a diferentes contextos y retos. Es la combinación de conocimientos, habilidades y actitudes que permite a una persona desenvolverse bien en diferentes situaciones. Dinámicas y capaces de desarrollarse con el tiempo a través de la experiencia y la retroalimentación, las competencias son las cualidades generales que permiten ejercer eficazmente habilidades como la comunicación, la resolución de problemas o el trabajo en equipo.

Algunas razones por las que las competencias son más importantes.

Rendimiento holístico

Las competencias explican eficazmente cómo los comportamientos de una persona le permiten alcanzar los resultados deseados en su función. No solo consideran lo que una persona puede hacer, sino también cómo lo hace, teniendo en cuenta su enfoque, mentalidad y habilidades interpersonales.

Adaptabilidad y crecimiento

Las competencias son transferibles y pueden aplicarse en diferentes contextos, lo que hace a las personas más adaptables y versátiles en sus carreras. Proporcionan una base para el aprendizaje y el desarrollo continuos, permitiendo a las personas evolucionar y prosperar en un entorno laboral en constante cambio.

Alineación con los objetivos de la organización

Las competencias están alineadas con los valores, la cultura y los objetivos estratégicos de una organización. Al definir y evaluar las competencias, las organizaciones pueden asegurarse de que los empleados tienen los comportamientos y habilidades necesarios para impulsar el éxito y lograr los resultados deseados.

Mejora de la toma de decisiones

Las competencias proporcionan un marco para tomar decisiones informadas sobre la contratación, promoción y desarrollo del talento. Ofrecen una visión holística del potencial y la idoneidad de una persona para un puesto, que va más allá de una lista de comprobación de aptitudes técnicas.

Por ejemplo, aunque un ingeniero informático posea competencias técnicas como la codificación y la resolución de problemas, otras como el trabajo en equipo, la comunicación y la adaptabilidad son igual de cruciales para colaborar eficazmente con los compañeros, comprender las necesidades de los usuarios y adaptarse a los cambiantes requisitos de los proyectos.

En cierto modo, las competencias engloban un conjunto más amplio de atributos que contribuyen al rendimiento general y al éxito en un puesto. Proporcionan una imagen más completa de las capacidades y el potencial de una persona, lo que permite a las organizaciones tomar mejores decisiones en materia de talento y a las personas prosperar en sus carreras.

Impulse su carrera con una evaluación de competencias

¿Qué habilidades comunes son más importantes que las capacidades?

Mientras que las aptitudes se refieren a competencias específicas adquiridas a través de la formación y la experiencia, las competencias abarcan una gama más amplia de comportamientos, actitudes y conocimientos que contribuyen al desempeño satisfactorio de una función.

Esenciales para los empleados que quieren prosperar en el mundo laboral moderno, las competencias son más importantes que las aptitudes porque van más allá de las capacidades técnicas necesarias para realizar un trabajo.

Adaptabilidad e innovación

En sectores tan cambiantes como la tecnología o la moda, la capacidad de adaptarse a las nuevas circunstancias y pensar de forma innovadora es crucial. Esta habilidad permite a las personas seguir el ritmo de las tendencias cambiantes, adoptar nuevas tecnologías y encontrar soluciones creativas a los retos.

Experiencia del cliente

Los sectores que dependen en gran medida de la satisfacción del cliente, como la hostelería o el comercio minorista, dan prioridad a las competencias relacionadas con la prestación de una experiencia excepcional al cliente. Esto incluye habilidades como la comunicación eficaz, la empatía, la resolución de problemas y la capacidad de anticiparse y responder a las necesidades de los clientes.

Colaboración y trabajo en equipo

Los sectores que requieren una amplia colaboración entre los miembros de un equipo, como la sanidad o la gestión de proyectos, valoran las aptitudes asociadas a un trabajo en equipo eficaz. Entre ellas figuran habilidades como la comunicación, la escucha activa, la resolución de conflictos y la capacidad de trabajar en armonía con grupos diversos.

Liderazgo y pensamiento estratégico

Los sectores que requieren personas que dirijan equipos o tomen decisiones estratégicas, como el empresarial o el de la consultoría, dan prioridad a las competencias relacionadas con el liderazgo y el pensamiento estratégico. Se trata de competencias como la toma de decisiones, la resolución de problemas, la planificación estratégica y la capacidad de inspirar y motivar a los demás.

Analítica y basada en datos

Los sectores que dependen en gran medida del análisis y el conocimiento de datos, como las finanzas o el marketing, valoran las capacidades relacionadas con el pensamiento analítico. Esto incluye habilidades como el análisis de datos, el pensamiento crítico, la atención al detalle y la capacidad de extraer conclusiones significativas a partir de los datos.

Resiliencia y gestión del estrés

Los sectores que implican entornos de alta presión, como la sanidad o los servicios de urgencias, dan prioridad a las competencias relacionadas con la resiliencia y la gestión del estrés. Esto incluye competencias como la inteligencia emocional, la adaptabilidad, la autonomía y la capacidad de mantener la calma y la concentración en situaciones difíciles.

Estos ejemplos demuestran que ciertas competencias van más allá de las capacidades técnicas específicas y desempeñan un papel esencial en distintos sectores de actividad. Al desarrollarlas y ponerlas de manifiesto, las personas pueden sobresalir en sus respectivos campos y destacar entre sus compañeros.

Las competencias son más importantes que las habilidades si se tiene en cuenta lo siguiente:

Las competencias permiten a los empleados afrontar el cambio y la incertidumbre. El lugar de trabajo actual está en constante cambio y es impredecible. A esto se suma el hecho de que, según un estudio de IBM, el 60 % de los ejecutivos identificó la adaptabilidad como la principal habilidad necesaria para tener éxito en el futuro (IBM, 2018). Los empleados deben ser capaces de ajustar sus habilidades y estrategias para satisfacer nuevas demandas y oportunidades. Esta habilidad permite a los empleados ser flexibles, creativos e innovadores para resolver problemas y alcanzar objetivos.

La competencia mejora el rendimiento y la productividad de los empleados. Según un estudio de Korn Ferry, las organizaciones con mayores niveles de competencia tenían 18 % más de ingresos por empleado que las organizaciones con niveles más bajos (Korn Ferry, 2016). Los empleados competentes pueden aplicar sus habilidades con eficacia y eficiencia en diferentes situaciones. También pueden adquirir nuevas habilidades rápida y fácilmente cuando sea necesario. La competencia ayuda a los empleados a maximizar su potencial y ofrecer resultados de alta calidad.

La competencia fomenta el crecimiento y el desarrollo de los empleados. Los empleados competentes pueden identificar sus puntos fuertes y débiles y buscar feedback y mejoras. También pueden establecer objetivos realistas y estimulantes y perseguirlos con pasión y perseverancia. Según un estudio de LinkedIn, el 94 % de los empleados afirmaron que permanecerían más tiempo en una empresa que invirtiera en su aprendizaje y desarrollo (Linkedin, 2018).La competencia motiva a los empleados a aprender continuamente y a desarrollarse profesionalmente.

Las competencias son importantes, pero no bastan para triunfar en el mundo dinámico y competitivo de hoy. Las aptitudes pueden quedarse obsoletas, anticuadas o irrelevantes a medida que cambian la tecnología, los mercados y las necesidades de los clientes. Las competencias, en cambio, son más duraderas, adaptables y transferibles. Le permiten aplicar sus habilidades en diferentes contextos, situaciones y retos. También le ayudan a adquirir nuevas capacidades con mayor rapidez y eficacia.

Para ilustrar este punto, he aquí algunos ejemplos de cómo las competencias pueden marcar la diferencia en tu carrera:

Imagina que eres un diseñador gráfico que sabe utilizar Photoshop. Esa es una habilidad. Sin embargo, si además tienes la habilidad de la creatividad, puedes utilizar Photoshop para crear diseños originales e innovadores que destaquen entre la multitud.

Si eres un vendedor que sabe vender muy bien un producto, eso es una habilidad. Eso es una habilidad. Sin embargo, si también tienes la habilidad de la empatía, puedes comprender las necesidades y emociones de tus clientes y adaptar tu discurso de ventas en consecuencia.

Para usted, como directivo, que es muy bueno delegando tareas. Eso es una habilidad. Pero si además tienes la habilidad del liderazgo, puedes animar a los miembros de tu equipo a dar lo mejor de sí mismos y alcanzar sus objetivos.

Como ves, las competencias pueden mejorar tus habilidades y hacerte más útil y eficaz en tu puesto.

¿Cómo puede desarrollar sus capacidades?

Las habilidades no son "algo" con lo que se nace o se adquiere de la noche a la mañana. Pueden desarrollarse a lo largo del tiempo mediante la práctica deliberada y la reflexión.

Desarrollar tus capacidades no es tan sencillo como hacer un curso o leer un libro. Requiere un proceso continuo de autoconciencia, reflexión, retroalimentación y acción.

Algunos pasos que puedes dar para desarrollar tus habilidades:

Identifique sus puntos fuertes y débiles

Las competencias básicas son las capacidades esenciales que definen su función y su valor dentro de la organización. Son las habilidades que debe dominar y en las que debe destacar para desempeñar bien su trabajo. Puedes identificar tus competencias básicas analizando la descripción de tu puesto, pidiendo opinión a tu jefe o a tus compañeros o realizando una prueba de evaluación de competencias. Pregúntese qué competencias tiene ya y cuáles necesita mejorar. Utiliza diversas herramientas, como las autoevaluaciones, la retroalimentación de 360 grados o las revisiones del rendimiento, para identificar tus carencias de competencias.

Evalúe su nivel actual

Una vez que haya identificado sus competencias clave, tiene que evaluar su nivel actual de competencia en cada una de ellas. Para ello, puede calificarse a sí mismo en una escala del 1 al 5, donde 1 significa novato y 5 experto. También puede pedir a su jefe, compañeros o clientes que le den su opinión sobre cómo demuestra cada habilidad en su trabajo.

  1. Adaptabilidad e innovación

2. Experiencia del cliente

3. colaboración y trabajo en equipo

4. Liderazgo y pensamiento estratégico

5. Analítica y basada en datos

6. Resiliencia y gestión del estrés

Establezca objetivos específicos y mensurables para el desarrollo de las competencias.

Sobre la base de su evaluación, debe establecer objetivos específicos y mensurables para mejorar su nivel de destreza en cada habilidad básica. Una vez que sepas qué habilidades quieres desarrollar, establece objetivos SMART que te ayuden a conseguirlas. SMART son las siglas en inglés de específico, mensurable, alcanzable, pertinente y limitado en el tiempo. Por ejemplo, si quieres mejorar tus habilidades de comunicación, puedes fijarte un objetivo del tipo "Haré una presentación de 10 minutos a mi equipo cada semana durante el próximo mes". Si quiere mejorar su capacidad de comunicación, puede fijarse un objetivo del tipo "Haré una presentación clara y concisa del proyecto X al equipo directivo el mes que viene". También debes identificar las acciones y los recursos que necesitas para alcanzar tu objetivo, por ejemplo haciendo un curso de técnicas de presentación, formándote con un mentor o estudiando las mejores prácticas.

Siga sus progresos y evalúe sus resultados.

Evaluar y mejorar es el siguiente paso. Por último, tienes que evaluar tus progresos y resultados e identificar los aspectos que debes mejorar. Pida opiniones a otras personas que puedan observar su actuación o midiendo sus resultados con respecto a sus objetivos. También puede reflexionar sobre sus propias experiencias y aprender de sus éxitos y fracasos. Supervise sus progresos y evalúe sus resultados. A medida que trabaje para alcanzar sus objetivos de desarrollo de competencias, deberá hacer un seguimiento de sus progresos y evaluar sus resultados con regularidad. Lleve un diario de sus logros y retos, pida opiniones a otras personas o mida sus resultados en función de sus expectativas. También puede celebrar sus éxitos y aprender de sus fracasos a lo largo del camino.

Busca oportunidades para aprender.

Acércate. Intenta aprender de otros que tengan las habilidades que quieres desarrollar. Puedes hacerlo buscando mentores, entrenadores, modelos de conducta o compañeros que puedan ofrecerte consejo, comentarios o apoyo. También puedes buscar programas de formación formales o informales, cursos, talleres o seminarios web que te permitan adquirir nuevas habilidades o conocimientos relacionados con tus competencias. Busque nuevas oportunidades y retos para el desarrollo de sus competencias. Por último, debes buscar nuevas oportunidades y retos para el desarrollo de competencias en tu lugar de trabajo. Puedes hacerlo ofreciéndote voluntario para nuevos proyectos o tareas que requieran que utilices o aprendas nuevas competencias, pidiendo más responsabilidad o autonomía en tu trabajo, o buscando la tutoría o el entrenamiento de alguien que tenga un nivel de competencias superior al tuyo.

Practica y aplica.

Embárcate en una aventura. No basta con aprender: hay que practicar y aplicar lo aprendido en situaciones de la vida real. Aprovecha cualquier oportunidad para utilizar tus habilidades en tu trabajo o en tu vida personal. Por ejemplo, si quieres mejorar tu capacidad de resolución de problemas, puedes ofrecerte voluntario para dirigir un proyecto que implique resolver un problema o reto complejo.

En conclusión, tanto las aptitudes como las capacidades son importantes para su desarrollo personal y profesional. Sin embargo, las competencias son más valiosas que las habilidades porque le permiten rendir mejor en cualquier situación y adaptarse más rápidamente al cambio, lo que va de la mano de la constante evolución del lugar de trabajo actual. Al desarrollar su nivel de competencia en sus competencias básicas, puede mejorar su rendimiento, productividad, crecimiento y desarrollo en su puesto de trabajo. También puede prepararse para futuras oportunidades y retos que puedan surgir en su carrera. Si sigues estos pasos, podrás desarrollar tus competencias y desarrollar todo tu potencial. La competencia es la clave del éxito en el mundo laboral actual.

Ahora que ya sabes qué son las habilidades y aptitudes y cómo desarrollarlas, ¡es hora de pasar a la acción! No esperes a mañana; ¡empieza hoy! Elige una aptitud que quieras mejorar y sigue los pasos anteriores. ¡Te sorprenderán los resultados!

Referencias :

IBM (2018). La guía empresarial para cerrar la brecha de habilidades. https://www.ibm.com/downloads/cas/EPYMNBJA

Korn Ferry (2016). Previsión del talento. https://www.kornferry.com/content/dam/kornferry/do…

LinkedIn (2018). Informe sobre aprendizaje en el lugar de trabajo 2018. https://learning.linkedin.com/content/dam/me/busin…

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